Farmacocinética: La absorción sistémica de lidocaína y prilocaína de EMLA® es dependiente de la dosis, del área y del tiempo de aplicación, del grosor de la piel
(el cual varía en diferentes áreas del cuerpo) y de otras condiciones de la piel, tratándose de úlceras en pierna, depende también de las características de la úlcera.
Después de la aplicación de 60 g de crema/400 cm2 durante tres horas en la piel intacta de muslo en adultos, el grado de absorción fue aproximadamente de 5% de lidocaína y prilocaína. Las concentraciones plasmáticas máximas (promedio 0.12 y 0.07 µg/ml) se alcanzaron entre las dos a seis horas después de la aplicación.
El grado de absorción sistémica fue del 10% después de la aplicación en la cara (10 g/100 cm2 durante dos horas). Las concentraciones plasmáticas máximas (promedio 0.16 y 0.06 µg/ml) se alcanzaron después de 1.5-3 horas.
Los niveles plasmáticos de lidocaína y prilocaína en pacientes tanto geriátricos como no geriátricos después de la aplicación de EMLA® en piel intacta son muy bajos y están muy por debajo de los niveles potencialmente tóxicos.
Después de la aplicación de 1.0 g de EMLA® en 10 cm2 durante una hora en recién nacidos y menores de tres meses, las concentraciones plasmáticas máximas de lidocaína y prilocaína fueron de 0.135 µg/ml y de
0.107 µg/ml, respectivamente. Después de la aplicación de 2.0 g de EMLA® en aproximadamente 16 cm2 durante cuatro horas en niños de entre tres y 12 meses, las concentraciones plasmáticas máximas de lidocaína y prilocaína fueron de 0.155 µg/ml y 0.131 µg/ml, respectivamente. Posterior a la aplicación de 10 g de EMLA® en aproximadamente 100 cm2 durante dos horas en niños entre dos y tres años, las concentraciones plasmáticas máximas de lidocaína y prilocaína fueron de 0.315 µg/ml y 0.215 µg/ml, respectivamente. Después de la aplicación de entre 10 a 16 g de EMLA® en aproximadamente 100-160 cm2 durante dos horas en niños de seis y ocho años, las concentraciones plasmáticas máximas de lidocaína y prilocaína fueron de 0.299 µg/ml y 0.110 µg/ml, respectivamente.
Después de una aplicación de entre 5 a 10 g de EMLA® en 64 cm2 de úlceras en pierna durante 30 minutos, los niveles plasmáticos máximos de lidocaína se encuentran en un rango de 0.05-0.25 µg/ml, con un valor individual de 0.84 µg/ml mientras que los de prilocaína son de 0.02-0.08 µg/ml, alcanzándose dentro de un periodo de una a 2.5 horas.
Después de un tiempo de aplicación de 24 horas en úlceras en pierna en un área de 50 a 100 cm2, los niveles en plasma de lidocaína (0.19-0.71 µg/ml) y de prilocaína (0.06-0.28 µg/ml) se alcanzaron dentro de dos a cuatro horas.
La aplicación repetida de 2 a 10 g de EMLA® en úlceras en pierna en un área de 62 cm2 durante 30 a 60 minutos de tres a siete veces a la semana, con 15 o más dosis durante un mes, aparentemente no produjo acumulación en plasma ni de lidocaína, ni de sus metabolitos, monoglicina xilidida y 2,6 xilidina, o de prilocaína y su metabolito orto-toluidina. Los niveles plasmáticos máximos para lidocaína, monoglicina xilidida y 2,6 xilidina fueron de 0.41, 0.03 y 0.01 µg/ml, respectivamente. Las concentraciones plasmáticas máximas para prilocaína y orto-toluidina fueron de 0.08 µg/ml y 0.01 µg/ml, respectivamente.
Después de la aplicación de 10 g de EMLA® durante 10 minutos en la mucosa vaginal, las concentraciones plasmáticas máximas de lidocaína y prilocaína (promedio 0.18 µg/ml y 0.15 µg/ml, respectivamente) se alcanzaron después de 20 a 45 minutos.
Farmacodinamia: EMLA® Crema produce anestesia de la piel por medio de la liberación de lidocaína y prilocaína a las capas epidérmica y dérmica de la piel, produciéndose acumulación de estos anestésicos locales en la vecindad de los receptores del dolor y terminaciones nerviosas cercanas.
Lidocaína y prilocaína son agentes anestésicos locales de tipo amídico. Ambos estabilizan las membranas neuronales inhibiendo el flujo iónico que se requiere para la iniciación y conducción de impulsos, produciendo así la anestesia local.
La calidad de la anestesia depende del tiempo de aplicación y de la dosis.
EMLA® Crema se aplica a la piel intacta, de preferencia bajo un parche o apósito oclusivo. El tiempo requerido para lograr la anestesia confiable de la piel intacta es de una a dos horas, dependiendo del tipo de procedimiento.
En estudios clínicos de EMLA® en piel intacta, no se observaron diferencias de seguridad ni eficacia (incluido el tiempo de inicio de la anestesia) entre pacientes geriátricos (65-96 años) y pacientes más jóvenes.
El tiempo que dura la anestesia después de la aplicación durante una a dos horas de EMLA®, es por lo menos de dos horas después de retirar el vendaje o la crema.
El uso de EMLA® antes de la vacuna para sarampión-paperas-rubéola o las vacunas intramusculares para difteria-tos ferina-tétanos, poliovirus inactivado Haemophilus influenzae b o hepatitis B no afecta los niveles medios de anticuerpos, las tasas de seroconversión ni la proporción de pacientes que alcanzan niveles protectores o positivos de anticuerpos después de la inmunización, en comparación con pacientes tratados con placebo.
La absorción en la mucosa genital es más rápida y el tiempo de latencia de la anestesia es más corto que después de la aplicación directa en la piel.
Después de cinco a 10 minutos de aplicación de EMLA® en la mucosa genital femenina, la duración promedio de la analgesia fue de 15 a 20 minutos produciéndose un dolor agudo o sensación de piquete como respuesta a
un estímulo láser de argón.
La anestesia adecuada para la limpieza de las úlceras en pierna, se alcanza después de 30 minutos de aplicación de la crema, en la mayoría de los pacientes. Un tiempo de aplicación de 60 minutos mejora aún más la anestesia.
Los procedimientos de limpieza deben iniciarse dentro de los 10 minutos posteriores a la remoción de la crema.
Actualmente no se tiene mayor información clínica para periodos de espera más largos.
EMLA® reduce el número de sesiones requeridas para obtener la limpieza de las úlceras en comparación con el número de sesiones que se necesitan con una crema desbridante con placebo.
No se han observado efectos negativos sobre la cicatrización de la úlcera o de la flora bacteriana.
EMLA® produce una respuesta vascular bifásica que involucra vasoconstricción inicial seguida de vasodilatación en el sitio de aplicación. En pacientes con dermatitis atópica, se observa una reacción similar pero más corta, presentando eritema después de 30 a 60 minutos, lo que indica una absorción más rápida a través de la piel.