Farmacocinética:
Absorción y distribución: Candesartán cilexetilo es un profármaco adecuado para uso oral. Se convierte rápidamente al fármaco activo, candesartán, por hidrólisis de un enlace éster, durante la absorción desde el tracto gastrointestinal.
La biodisponibilidad absoluta promedio de candesartán es aproximadamente 40% después de la administración de una solución oral de candesartán cilexetilo. La concentración sérica pico promedio (Cmáx) se logra 3 a 4 horas después de la ingesta de la tableta. Las concentraciones séricas de candesartán se incrementan linealmente al aumentar las dosis dentro del rango de dosis terapéuticas. No se han observado diferencias relacionadas al sexo en la farmacocinética de candesartán. El área bajo la curva (ABC) de concentración sérica contra el tiempo no se ve afectada significativamente por los alimentos. Candesartán se encuentra altamente unido a proteínas plasmáticas (más de 99%). El volumen de distribución aparente de candesartán es 0.1 l/kg.
Metabolismo y eliminación: Candesartán se elimina principalmente a través de orina y bilis, y sólo en menor grado por metabolismo hepático. La vida media terminal de candesartán es de nueve horas, aproximadamente. No hay acumulación después de dosis múltiples.
La depuración plasmática total de candesartán es de aproximadamente 0.37 ml/min/kg, con una depuración renal de alrededor de 0.19 ml/min/kg. Después de una dosis
oral de candesartán cilexetilo marcado con 14C, alrededor de 30% y 70% de la radiactividad total se recupera en orina y heces, respectivamente.
Poblaciones especiales: En los ancianos (mayores de 65 años) tanto Cmáx como ABC de candesartán se encuentran incrementadas en comparación con los individuos más jóvenes. Sin embargo, puesto que la respuesta de presión sanguínea y la incidencia de eventos adversos son similares después de una dosis dada de candesartán en pacientes jóvenes y ancianos, no se requiere de un ajuste de dosis en estos últimos.
En comparación con sujetos con función renal normal, los pacientes con deterioro leve a moderado de la función renal aumentaron la Cmáx y el ABC de candesartán, con dosis repetidas, en aproximadamente 50 y 70%, respectivamente, pero la vida media de eliminación no se alteró. Los cambios correspondientes en pacientes con deterioro severo de la función renal fueron aproximadamente 50 y 110%, respectivamente. En los pacientes con alteración severa en la función renal (esto es, depuración de creatinina < 30 ml/min/1.73 m2 BSA) la vida media de candesartán se duplicó aproximadamente. La farmacocinética en pacientes en hemodiálisis fue similar a la de los pacientes con deterioro severo de la función renal. En pacientes con deterioro leve a moderado de la función hepática, hubo un incremento de 23% en el ABC de candesartán.
Farmacodinamia: La angiotensina II es la hormona vasoactiva principal del sistema renina-angiotensina-aldosterona y juega un papel significativo en la fisiopatología de la hipertensión y otras enfermedades cardiovasculares. También juega un papel importante en la patogénesis de la hipertrofia y daño a órgano blanco. Los efectos fisiológicos principales de la angiotensina II, como vasoconstricción, estimulación de aldosterona, regulación de la homeóstasis de sal y agua, y estimulación de crecimiento celular, son mediados vía el receptor tipo 1 (AT1).
Candesartán es un antagonista del receptor de angiotensina II, selectivo para los receptores AT1, con una fuerte unión a y lenta disociación del receptor. No cuenta con actividad agonista.
Candesartán no inhibe la enzima convertidora de angiotensina (ECA), el cual convierte la angiotensina I en angiotensina II y degrada a la bradicinina. Debido a que no hay efecto sobre la ECA y no hay potenciación de la bradicinina ni la sustancia P, es poco probable que los antagonistas del receptor de angiotensina II se asocien con la producción de tos. Esto ha sido confirmado en estudios clínicos controlados con candesartán. Candesartán no se une ni bloquea otros receptores hormonales o canales iónicos, que se sabe son importantes en la regulación cardiovascular.
En la hipertensión, candesartán provoca una reducción
de la presión arterial, dosis-dependiente y de larga duración. La acción antihipertensiva se debe a una disminución en la resistencia periférica sistémica, mientras que el ritmo cardiaco, volumen-latido y gasto cardiaco no se ven afectados. No hay ninguna indicación de hipotensión seria o exagerada con la primera dosis ni efecto de rebote después de interrumpir el tratamiento.
Candesartán es efectivo en todos los grados de hipertensión. Después de la administración de una sola dosis, el inicio del efecto antihipertensivo generalmente se presenta antes de transcurridas dos horas. Con tratamiento continuo, la reducción máxima en la presión sanguínea con cualquier dosis se logra generalmente en cuatro semanas y se mantiene durante el tratamiento a largo plazo. Proporciona una reducción de la presión sanguínea efectiva y uniforme en el intervalo de dosis de 24 horas, con una proporción meseta/pico que confirma la dosis una vez al día. Candesartán puede ser usado como monoterapia o en combinación con otros fármacos antihipertensivos, como diuréticos tiazídicos y antagonistas del calcio, para lograr una mayor eficacia. Candesartán es similarmente efectivo en todos los pacientes, independientemente de su edad o sexo.
Candesartán tiene efectos hemodinámicos renales favorables. Incrementa el flujo sanguíneo renal y mantiene o incrementa la tasa de filtración glomerular mientras que se reduce la resistencia vascular renal y la fracción
de filtración. Candesartán no tiene efectos adversos sobre la glucosa en sangre ni en el perfil de lípidos.
Farmacología en insuficiencia cardiaca: El tratamiento con candesartán reduce la mortalidad y la hospitalización debidas a insuficiencia cardiaca y mejora los síntomas en pacientes con disfunción sistólica ventricular izquierda como se mostró en el programa Candesartan in Heart failure-Assessment of Reduction in Mortality and morbidity (CHARM).
Este programa multinacional, controlado con placebo y doble-ciego en pacientes con insuficiencia cardiaca crónica (CHF) con una clase funcional de la NYHA II a IV, consistió en tres estudios separados: CHARM alternativo (n = 2028) en pacientes con fracción de expulsión ventricular izquierda (LVEF) £ 40% que no estaban siendo tratados con un IECA debido a intolerancia (principalmente por tos, 72%), CHARM añadido (n = 2548) en pacientes con LVEF £ 40% y que estaban siendo tratados con un IECA y CHARM preservado (n = 3023) en pacientes con LVEF > 40%. Los pacientes bajo una terapia óptima en condiciones basales, fueron aleatorizados a placebo o candesartán (titulándolos de 4-8 mg una vez al día a
32 mg una vez al día, o la máxima dosis bien tolerada, la dosis promedio fue de 24 mg) y se les dio seguimiento por 37.7 meses (como valor de la mediana). Después de 6 meses de tratamiento, 63% de los pacientes ya estaban tomando candesartán y 89% de ellos ya habían alcanzado la dosis objetivo de 32 mg.
En el CHARM alternativo, la variable compuesta de, mortalidad cardiovascular o la primera hospitalización por CHF se redujo significativamente con candesartán en comparación con placebo (cociente de riesgo (HR) 0.77, intervalo de confianza (CI) al 95%: 0.67-0.89, p < 0.001). Esto corresponde a una reducción de riesgo relativo de 23%. Catorce pacientes necesitaron ser tratados durante todo el estudio para prevenir que un paciente muriera de un evento cardiovascular o fuera hospitalizado para el tratamiento de la insuficiencia cardiaca. La variable compuesta de mortalidad por todas las causas o la primera hospitalización por CHF también fue significativamente reducida con candesartán (HR 0.80, CI 95%: 0.70-0.92, p = 0.001). Ambos componentes de mortalidad y morbilidad (hospitalización por CHF) de esta variable compuesta, contribuyó a los efectos favorables de candesartán. El tratamiento con candesartán produjo una mejoría en la clase funcional de la NYHA (p = 0.008).
En el CHARM añadido, la variable compuesta de mortalidad cardiovascular o la primera hospitalización por CHF, se redujo con candesartán en comparación con placebo (HR 0.85, CI 95% 0.75-0.96, p = 0.011). Esto corresponde a una reducción en el riesgo relativo de 15%. Se necesitó tratar 23 pacientes por toda la duración del estudio para prevenir que un paciente muriera por un evento cardiovascular o que fuera hospitalizado para ser tratado por insuficiencia cardiaca. La variable compuesta de mortalidad por cualquier causa o la primera hospitalización por CHF, también fue reducida significativamente por candesartán (HR 0.89, CI 95% 0.78-0.98, p = 0.021).
Ambos componentes de la variable compuesta, mortalidad y morbilidad, contribuyeron a los efectos favorables de candesartán. El tratamiento con candesartán produjo una mejoría en la clase funcional de la NYHA (p = 0.020).
En el CHARM preservado, no se alcanzó una reducción estadísticamente significativa en la variable compuesta de mortalidad cardiovascular o la primera hospitalización por CHF (HR 0.89, CI 95% 0.77-1.03, p = 0.118). La reducción numérica fue atribuible a la reducción en la hospitaliza-ción por CHF. No hubo evidencia de algún efecto sobre la mortalidad en el estudio.
La reducción en mortalidad por cualquier causa no fue estadísticamente significativa, cuando se examinó por separado en cada uno de los tres estudios CHARM.
Sin embargo, también se evaluó la morbilidad por cualquier causa en poblaciones agrupadas, CHARM alternativo y CHARM añadido (HR 0.88, CI 95% 0.79-0.98, P = 0.018) y en los tres estudios (HR 0.91, CI 95% 0.83-1.00, p = 0.055).
Los efectos benéficos de candesartán sobre la mortalidad cardiovascular y la hospitalización por CHF fueron consistentes, independientemente de la edad, el sexo y de la medicación concomitante. Candesartán fue eficaz también en pacientes que estaban tomando, tanto betabloqueadores como inhibidores de la ECA (IECA) al mismo tiempo y se obtuvo el beneficio, independientemente de que estuvieran tomando o no IECAs a las dosis objetivo recomendadas por los lineamientos de tratamiento.
En pacientes con CHF y función ventricular izquierda deprimida (LVEF £ 40%), candesartán disminuyó la resistencia vascular sistémica y la presión capilar pulmonar en cuña; en plasma aumentó la actividad de la renina y la concentración de angiotensina II y disminuyó la concentración de aldosterona.